- FRACTURAS
- Generalidades de las fracturas
- Fracturas típicas del hueso en el niño
- Tratamiento de las fracturas en el niño: generalidades
- Clasificación y tratamiento de las fracturas fisarias
- Fracturas cintura escapular, hombro y brazo del niño
- Fracturas del codo del niño
- Fracturas del antebrazo y muñeca del niño
- Fracturas de la mano en el niño
- Heridas de la extremidad superior del niño
HERIDAS EXTREMIDAD SUPERIOR
Las heridas en el niño requieren más frecuentemente revisión en quirófano bajo anestesia debido al componente emocional que hace que sea difícil explorarlas en la sala de urgencias. Debemos descartar lesiones profundas a la piel para repararlas (27).
- La isquemia (falta de riego sanguíneo) o sangrado pulsátil indica una lesión arterial (27A).
- La parálisis de algunos músculos o pérdida de sensibilidad de algunos territorios cutáneos indica una lesión nerviosa. En los niños pequeños, la exploración de la sensibilidad es difícil. Las heridas en los dedos, pueden asociar una lesión de los nervios que se pueden diagnosticar con el test de la pasa (27B). La imersión del dedo en agua no produce las rugosidades típicas de la piel.
- La pérdida de la cascada digital de los dedos indica una lesión de los tendones flexores (27A).
Lesiones y aplastamientos ungueales
El atrapamiento de la punta de los dedos es una de las lesiones más frecuentes en la infancia, frecuentemente por el cierre de puertas.
Además de la herida de la piel de la punta de los dedos y del hueso de la punta de la falange, se puede lesionar la matriz o el lecho ungueal.
La lesión de la piel se sutura de la forma habitual y el hueso suele unir sin problemas.
Si se lesiona la matriz o el lecho, la uña puede crecer inadecuadamente. Si sopechamos una lesión del lecho, debemos retirar la uña y repararlo mediante sutura con hilo o adhesiva para evitar problemas de avance en el crecimiento de la uña (Fig. 29A). Si perdemos hueso de la punta del dedo, al no tener la matriz ungueal un soporte, se incurva hacia abajo dando la deformidad en pico de loro (Fig. 29B).